Skyshaper, Covenant

Más de diez años editando discos y este trío sueco no ha dado ni un solo paso en falso, por algo son de mis favoritos. Cada uno tendremos nuestros discos favoritos y discos que nos han gustado menos, pero resulta imposible negar la calidad y el buen hacer de Covenant. Desde su primer álbum han ido evolucionando, evitando estancarse en el EBM clásico y manteniéndose alejados del future pop. Tras dos discos prometedores y varios hits, consiguieron el disco soñado por cualquier banda del género: “Europa”. Calidad en todos sus temas, variado y un sonido muy personal. Cuando muchos esperaban otro Europa, nos sorprendieron con un cambio en su sonido gracias a la introducción de elementos mucho más disco. Algunos de los fans más antiguos se sintieron decepcionados, surgieron nuevos seguidores, pero lo que esta claro es que no dejo indiferente a nadie. Finalmente con Northern Light se acercaron al electropop y consiguieron dar una muestra de madurez.

Llegados a este punto cabe preguntarse ¿qué podemos esperar de este “Skyshaper”? Pues por fin tenemos la respuesta: un gran disco que sigue la línea de “Northern Light”, pero sin dejar de incorporar nuevos elementos. Hay canciones bailables, preciosas baladas de diversos estilos, cortes algo más arriesgados...

El encargado de abrir el álbum es “Ritual Noise”, tema elegido como single de adelanto. La cosa no podía empezar mejor: la maravillosa voz de Eskil junto a unos sintetizadores, dan paso a un percusión que va entrando progresivamente hasta estallar. La contundencia de las bases y alguno de los arreglos pueden recordar a los temas más bailables de “Europa”. El siguiente corte, “Pulse”, es puro electropop, y una clara muestra de que han estado muy atentos a lo que se ha cocido estos últimos años en la escena electrónica. Bases muy marcadas y unos teclados algo retro son los protagonistas junto a unas melodías pueden recordar en determinados momentos a “Dead Stars”. “Happy man” supone un respiro tras este intenso comienzo. La voz del Sr.Simonson más bella y melancólica que nunca es la columna vertebral de este corte. Unas sencillas pero muy efectivas melodías analógicas ayudan a crear una atmósfera realmente mágica que contrasta con la dureza de las letras.

Tras este descanso “Brave new world” vuele a subir el ritmo. Bases consistentes, hermosas melodías de piano y sintetizador, una voz realmente melancólica y unas voces extrañamente distorsionadas de fondo, son los elementos que componen este grandísimo tema. Otra muestra de la variedad de registros que posee Eskil, y gracias a la cual Covenant parte con ventaja respecto a otros grupos. “The men” particularmente me parece muy buena, me encantó el ritmo y los arreglos, aunque puede llegar a ser repetitiva, ya que su lirica solo consta de unas 5 lineas. “Sweet and salty” introduce nuevos sonidos en su repertorio. Una vez más resulta evidente la influencia que ha tenido sobre ellos algunos de los sonidos más de moda en toda Europa, esta vez en su faceta más dura. Un tema oscuro, con bases tecno y un toque industrial. Muy interesante.

”Greater than the sun” cambia la dinámica del disco . Es bastante tranquilo y oscuro, con un sonido muy parecido al de “Sequencer”. Un buen tema algo más experimental que los cortes anteriores. “20 Hz” resulta algo confuso: combina un medio tiempo con unas bases bastante agresivas y repetitivas dando como resultado algo irregular. “Spindrift” vuelve a desmarcarse del sonido de los otros temas del disco que en particular me encanta. Bases muy Nitzer Ebb que parecen sonar algo alejadas, junto a unos coros femeninos que aparecen y desaparecen a lo largo de toda la canción. A todo esto hay que sumarle la voz de Eskil actuando como una especie de narrador. Finalmente, “The world is growing loud” es la balada elegida para cerrar el álbum. Un broche de oro perfecto.

Covenant demuestra una vez más que tienen una facilidad realmente asombrosa para crear grandes canciones, pero esto puede llegar a jugar en su contra, ya que hace que le exijamos mucho más que a la mayoría de grupos. Tal vez muchos esperaban un nuevo giro en su sonido, pero hacer discos con tanta calidad y haber conseguido un sonido muy personal no es cosa fácil. No podemos exigirles que se reinventen en cada nuevo trabajo. A pesar de ello, se encuentran en un gran estado de forma, así que no sería de extrañar que en futuros trabajos vuelvan a sorprendernos con lo inesperado, y si juntamos el factor sorpresa con la calidad que atesoran, puede que todavía no hayamos oído lo mejor de su trabajo.

No es tecnopop, no es futurepop, simplemente es Covenant...
y yo soy fan...